
By MetroVoley
NAUTICO HACOAJ, ES DE DIVISION DE HONOR
Náutico Hacoaj se coronó campeón invicto con 51 puntos y 24 partidos al hilo. De esta manera logró el ascenso a la máxima categoría, Mariano Silberstein su entrenador y Mauro Rus su capitán nos cuentan en primera persona lo que significa este logro.
Hace un año atrás, Hacoaj recibía el duro golpe de descender, golpe que arrastraba dolor, bronca e incertidumbre de como revertir la historia. Desde entonces Mariano Silberstein y sus dirigidos se pusieron el objetivo de volver, de levantarse e ir por la gloria máxima. Hoy, luego de consagrarse campeones en décima fecha faltan otras cuatro, recordando la noche del miércoles en la sede de Capital Federal, llena de emociones y felicidad que compartió con sus seres queridos, Mariano analiza el gran torneo que hizo Hacoaj: “El equipo empezó en un nivel más alto del esperado y consiguiendo buenos resultados. Así y todo fue creciendo partido a partido y poniendo desafíos. Se formó un equipo largo que jugaba de la misma manera siempre y a pesar de los seis partidos que jugamos formando cada fecha un equipo distinto, la solidez fue la misma”. Por su parte, Rus, emblema del equipo habló de la regularidad del plantel y la satisfacción de ser el capitán de sus compañeros: “El equipo fue muy regular a lo largo del torneo. Los objetivos que nos planteamos fueron claros y los pudimos lograr. Supimos jugar cada partido de la forma que teníamos que hacerlo. Debido a la longitud del torneo de primera, sabíamos que íbamos a encontrar momentos duros en el torneo, donde es difícil sostener el nivel y sin embargo hasta pudimos revertir esas adversidades. Como capitán me saco el sombrero con este grupo, que no se conforma con nada y quieren jugar estos 4 partidos finales, como si fueran los primeros”.
Náutico como institución apoyo el proyecto y acompaño el equipo y fue otra pieza clave para lograr el ascenso a División de Honor, así lo destaca Silberstein: “Lo significativo es que mantenemos una idea, una base de jugadores y un equipo de trabajo. Después de dos años difíciles, hoy se restructuraron muchas situaciones y contamos con nuevos dirigentes que nos acompañan. Entonces volvemos a lograr lo que nos proponemos”. Rus también se animó a hacer un análisis como jugador del club: “Mariano supo armar un grupo muy parejo y regular que encontró una forma de jugar al Voley que se basó en todos y en cada uno del equipo, desde los jugadores que estaban adentro de la campo, los que tenían menos tiempo en cancha, entrenadores, preparador físico y hasta los sub 21 que sumaban en los entrenamientos sin ser parte del plantel. Para mí en lo personal es un orgullo tener la cinta de este plantel. Es mi segundo ascenso con náutico y éste tiene un sabor particular. Porque me tocó ser parte del grupo desde la experiencia y el liderazgo. Para el club es importante haber pisado fuerte en primera y haber vuelto rápido a máxima categoría ya que es una institución prestigiosa. Que tiene instalaciones espectaculares y nos da los espacios que necesitamos para siempre crecer”
Tanto para Mariano Silberstein como para Mauro Rus es imprescindible dar las gracias a todos los fueron parte y aportaron para obtener este título: “Lo comparto con el equipo de laburo de la rama femenina y masculina, con Rabi, con toda la gente del club que se pone contenta. Con los utileros que nos ayudan mucho, con Andrea y con mis hijas. Le agradezco a Kekia y a pena y a este lindo grupo que supimos armar”. Así sentenció “El pela” en palabras sus emociones. Lo mismo hizo el capitán y central del equipo: “Se lo dedico a todos los que nos bancaron y a los que aportaron por lo menos con algo. La gente que nos vino a ver, siempre se llevaba un buen espectáculo y eso se disfruta. Se lo dedico a todo el plantel y parte del agradecimiento es para ellos. Porque sin cada uno del equipo, no hubiéramos logrado el objetivo de la forma q lo logramos. Le agradezco a los entrenadores, especialmente al Pela que sigue confiando en mí y siempre me alienta a lograr más y más cosas con el pasar de los años.
FOTO: Walter Rovner Fotografia